#RecomendaciónDeProgramaTelevisivo: Breaking Bad

junio 08, 2021

Han transcurrido trece años desde que se estrenó la serie Breaking Bad y sigue siendo tan popular como si fuera una show actual; es considerada por los críticos como una de las mejores series de la televisión de todos los tiempos, y debo admitir que pienso igual, la he visto completa dos veces porque vale la pena, y estoy segura de que en algún momento la volveré a ver.

Sí, es así de buena.


Recuerdo que no me llamaba la atención cuando fue estrenada, a pesar de que vi uno que otro capítulo de Malcom in the middle, también protagonizada por Bryan Cranston, y sabía que era un buen actor, no entendía la premisa de Breaking Bad y los comerciales no colaboraban tampoco, lo que mostraban era un personaje gritando en las calles o corriendo en ropa interior en el desierto. Para mí, no tenía sentido.


No fue sino hasta que transmitieron el capítulo final de la cuarta temporada, y faltaban un par de semanas para que empezara la quinta y última temporada, que me la recomendaron tan enfáticamente, que me sentí obligada a intentar darle una oportunidad, así que, renuente y sin ganas, vi el primer episodio.

Les cuento: me atrapó de inmediato, y tuve que esperar con desesperación que estrenaran los últimos episodios semana tras semana, lo cual fue una tortura y una fortuna al mismo tiempo. En parte agradezco haber visto las primeras temporadas seguidas, por qué no sé que hubiera sido de mi vida si hubiera tenido que esperar un año de por medio entre cada una de ellas.


En fin, les comentaré las razones por las cuales soy fan y la recomiendo.

Primero hablemos de la premisa, la cual no puede considerarse un spoiler porque lo que voy a mencionar ocurre en el primer episodio y además pueden verlo en su tráiler original:

Walter White es un profesor de química de bachillerato que es diagnosticado con cáncer de pulmón en etapa terminal (jamás fumó un cigarrillo en su vida), siempre fue una persona responsable y honesta quien a pesar de tener dos trabajos (en las tardes trabaja en un autolavado), no logra tener una vida holgada.


Consciente de que los gastos médicos consecuentes para intentar salvarlo (quimioterapia, radioterapia, etc.) -incluyendo el hecho de que era poco probable que lo lograra-, dejarían a su hijo discapacitado y esposa embarazada con deudas y en la ruina, decide asociarse con un antiguo estudiante de su clase (Jesse Pinkman), para cocinar metanfetamina, hacer dinero rápido y morir con la tranquilidad de que su familia quedaría con los suficientes fondos para el resto de sus vidas.

Sus conocimientos químicos lo llevan a producir la mejor droga del mercado lo cual despierta las alarmas tanto de la DEA (Administración de Control de Drogas​) -PLOT TWIST: su cuñado es Agente de esta agencia antinarcóticos-, así como el interés y violencia de otros narcotraficantes que no les agrada la competencia.


¿Por qué esta series es tan genial? La evolución de los personajes es fascinante y coherente, todos están muy bien desarrollados y espectacularmente actuados.

Te logras identificar con cada uno de ellos, tanto con Walter, el antihéroe consumado, como con Hank, su cuñado que desea descubrir la identidad del responsable de crear la droga que tiene enloquecido tanto a vendedores como a consumidores.

No ves buenos o malos, ves a personajes con distintas motivaciones y quedas en un limbo donde quieres que todos ganen, aunque sabemos que es imposible.


Los temas que toca, a pesar de que son desarrollados en el mundo de las drogas, son mundanos y comunes; despiertan emociones, te conectan y te enganchan, las entiendes y las procesas, y te hacen formar parte de la historia, la sientes como si la vivieras junto a ellos.

Y para mejorar todo, unos años después de que terminara la serie de manera impactante, produjeron una película que no es más que un epílogo que ata algunos cabos del episodio final. Por esa razón fue que la vi completa por segunda vez, porque deseaba tener todo fresco para ver esa cinta que se llamó: El Camino.


También tiene un spinoff llamado Better Call Saul, pero deben ver Breaking Bad para entender por qué también vale la pena verla.

No quisiera revelarles más de lo necesario (a pesar de que hay spoilers de sobra en Internet), porque es mejor que descubran cada plot twist por su cuenta, se los aseguro que hay suficientes para gritar por la sorpresa más de una vez; realmente, como dije al principio, es una de las mejores series de la televisión de todos los tiempos, y la película es solo la guinda del pastel.

Ambas opciones, tanto la serie como la película, están disponible en Netflix, así que si tienen la oportunidad de verla, no se la pierdan.


Hasta la próxima, les mando un abrazo literario.


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